miércoles, 18 de diciembre de 2013

Nuevo Nº de Cuadernos de Negación: Crítica de la Razón Capitalista


La ciencia, la tecnología y noción de progreso, no se encuentran por fuera del modo de producción capitalista, son parte constitutiva de éste y como una sola ideología imprimen un modo de percibir el mundo y de actuar en él. 
La razón dominante es burguesa, porque en tanto que idea pero también como fuerza material, actúa en beneficio del Capital.
Hasta hoy, la gran mayoría de los llamados a la “revolución” han sido y son en nombre de la libertad y la igualdad burguesas, de la ciencia y la Razón, de la eficacia y el progreso… y ya es tiempo de romper con ello.

Contenido:

▪ En estos tiempos… 
▪ Tecnología y ganancia 
▪ La realidad de lo virtual
- Una nueva mercancía: la intimidad
▪ Crítica de la razón capitalista- Introducción
- La catástrofe razonable
- Razón de Estado
- La vida no es un mecanismo
- Instrumentalización y cosificación
▪ El progreso del Capital
- Totalitarismo y dependencia
- La ilusión de eficiencia
- El ejemplo del coltan
- El progreso moderniza la pobreza
- Ruptura y revolución
▪ El condicionamiento tecnológico 
▪ La crítica al capital supone la crítica a la ciencia
- La otra cara de la ciencia del Capital: las ciencias ¿humanas?
- El totalitarismo científico
- La ciencia no es neutral
▪ Ciencia y enfermedad   
- Medicina, salud y sociedad
- Multiplicación de enfermedades
- Prevención y comercio
- Salud y normalidad
- Medicina y guerra
▪ Crítica de la crítica
- Ecologismo
- Primitivismo
- Posmodernismo
▪ ¡Romper con la mentalidad capitalista!

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Noviembre de 2013. 


Extraido de Cuadernos de Negación

miércoles, 23 de octubre de 2013

Sobre la pasada movilización en Tocopilla: Impresiones desde una Perspectiva Comunista

Por c.c.

Las revueltas llamadas ‘ciudadanas’ por la socialdemocracia –siempre deseosa de contener la ira proletaria y encausarla por los márgenes de la institucionalidad del capital- se repiten en diferentes partes de Chile y el mundo. Ya lo sabemos. Basta echar un vistazo a los medios de comunicación, incluso de los burgueses (casi todos), que no pueden omitir las informaciones cuando el humo de las barricadas amenaza con quemar los pelos de sus narices.

Sin embargo, no soy de lo que ven en cada movilización social un componente proto-revolucionario que fustigue al capital/estado en sus cimientos. No. Aunque tampoco considero una estupidez sin horizonte que los movimientos sociales no tengan un carácter revolucionario. En el caso de Tocopilla, es fruto de décadas de postergación estatal y del centralismo gubernamental, y de los efectos devastadores sobre el entorno y la calidad de vida de los explotados de las empresas que generan la energía para la acumulación capitalista. No obstante, eso es mucho –todos los tocopillanos concuerdan- tras años de letargo y amarga resignación ante los abusos y el olvido, y una efectiva labor de terror ejercida por la dictadura de Pinochet, en una zona de influencia histórica del partido (mal) llamado comunista.

A meses de las elecciones presidenciales, el Gobierno de Piñera no aguantaba otra revuelta tipo Aysén. Por eso el hambre de los grandes medios ante los sucesos, y por eso, la relativa celeridad con que las llamadas ‘autoridades de Gobierno’ se apersonaron en la zona.

ALGO DEL CONTEXTO

Tocopilla tiene dos centrales termoeléctricas en el centro de la ciudad. Sus chimeneas han humeado todo el siglo XX, y recién en 2007 la zona fue declarada saturada de contaminación. Al mismo tiempo, la Segunda Región de Chile presenta los más altos índices de cáncer del país, y Tocopilla lidera dichos índices como comuna. O sea, en acá es más nocivo salir a trotar por el borde la playa que fumarse una caja de cigarros al hilo. Y más aún, el moderno hospital inaugurado en 2011 en el marco de la reconstrucción luego del terremoto que afectó la zona en 2007 no tiene especialistas para tratar las enfermedades derivadas de la contaminación y otras, por sencillas que sean. Así, hasta ahora, la gente debe viajar 190 kilómetros hasta Antofagasta cuando la puta hora de la interconsulta llega y muchos han muerto esperando, o en el camino, en bus o sobre la ambulancia, la misma que traslada la ropa sucia de cama del hospital, ya que los brillantes tecnócratas de la arquitectura no incorporaron una lavandería al diseño del establecimiento.

Además, la empresa del ex yerno de Pinochet, Julio Ponce Lerou (SQM), produce tóxico salitre, y la Compañía Minera de Tocopilla hizo un aporte tan artístico como teñir de negro las arenas de las playas que antes eran de arenas blancas, tras años de botar su mierda directamente al mar. Podemos deducir, a la vez, el estado del fondo marino en la zona de bordemar.

Vale decir que el aporte que estas megaempresas hacen a la ciudad es mínimo, tanto en irrisorias patentes (Norgener, una de las termo, paga 20 lucas semestrales) como en el lavado de imagen que los burócratas gustan de llamar Responsabilidad Social Empresarial (RSE), donde sueltan unas chauchas para eventos tipo aniversario de la comuna, día del niño, y convenios varios que apuntan al famoso ‘emprendimiento’ o autogestión de la miseria, como llamamos los comunistas a esa vaina. La gente lo agradece, claro, porque de nada se pasa a poco, y el pasar de los pobres mejora cualitativamente cuando se cuenta con algunos medios de producción que les entreguen herramientas para facilitar el alimento, la vestimenta y otras necesidades básicas, sin tener que estar a los vaivenes del ánimo del patrón.

En otro plano, Tocopilla es una ciudad pobre, a pesar que miles de mineros, cuyo salario promedio debe andar por las 800 lucas, gasten algunas lucas en la ciudad, principalmente en comida, putas y diversión, es decir, en reproducción de las fuerzas. Todos se llevan el turro hacia sus lugares de origen.

En Tocopilla la burguesía local es mínima, y los sectores históricamente construidos para los ejecutivos que habitan en la zona (ubicados en la zona sur -“la villa”- que se opone a ‘las poblas’ del lado norte), son amenazados por los barrios que los circundan, donde en su mayoría viven proletarios estigmatizados como delincuentes por el puñado de gárgolas adictas a la pasta, a las que si les das la espalda te roban para matar la angustia que genera la sustancia (de efectos eufórico-paranoicos, por cierto).

En Tocopilla abundan los hoyos en las calles, los perros vagos rompen la basura de los contenedores y las esparcen por todos lados, cuando no es la propia gente –quizás por frustración- la que bota su mierda a la calle sin importarle nada. Se percibe una especie de falta de cariño por el lugar, y no los culpo: la consigna punk del ‘no futuro’ ha sido vivida en carne propia por varias generaciones. Los jóvenes se van a las minas y, los que pueden, a estudiar a Antofagasta, Iquique o Arica. Abundan las mujeres y lxs niñxs, así como los abusos patriarcales (violaciones, palizas, abusos a menores, prostitución…). A la mano de obra inmigrante peruana o boliviana (histórica y aceptada) se ha sumado con mucha fuerza la colombiana, que desempeña labores de trabajo sexual o trabajo precario, y a lo más una peguita en las mineras. A esta última, quizás por racismo, se le mira con desconfianza.

Como comuna pobre no hay recursos municipales para hermosear lugares como lo que queda libre del borde costero (cooptado por las empresas y el puerto) que incentiven el turismo o la recreación, y la industria cultural brilla por su ausencia.

No es un panorama muy alentador, pero es la realidad de este y de otros pueblos de Chile y el mundo, una zona de sacrificio en nombre del puto progreso, el crecimiento, y otras vainas con la que los tecnócratas de derechas e izquierdas se llenan la boca en simposios donde planean cómo cresta estrujarnos más sin que nos demos cuenta. Y en beneficio del país…

BARRICADA

Siendo rigurosos, la revuelta iniciada a fines de julio no partió apoyada por la mayoría de lxs tocopillanxs. Comenzó por una demanda gremial, la de transportistas y todos los que entre sus medios de producción utilizan vehículos, ante la licitación de una nueva planta de revisión técnica automatizada cuyos estándares de exigencia rechazarían muchos de los vehículos que, dado el estado de las calles, están hecho mierda.

La primera demostración de fuerza fue una marcha donde se cortó el conocido puente SQM, lugar estratégico, ya que si se corta, se corta el paso desde Iquique y Calama hacia el sur y, de pasada, se corta el flujo nacional de mercancías humanas y no humanas. Esa fue otra razón de la celeridad de las ‘autoridades’ por destrabar el conflicto.

En esa ocasión, tras tres horas de corte, la Gobernadora Provincial comprometió la visita de la Subsecretaria de Transportes para un par de días más. Sin embargo, de esa reunión no salió nada y duró menos de diez minutos.

La siguiente jornada aconteció una semana después e incluyó cortes de ruta del norte y sur de la ciudad, y del puente SQM, con barricadas potentes construidas con maquinaria de los transportistas, camiones, neumáticos en llamas, y un creciente apoyo cuantitativo de la población. La jornada de bloqueo duró 24 horas, llamando la atención de los medios manejados desde Santiago, y finalizó con los chanchos actuando con sumo poder represivo; chanchos venidos de Iquique y Antofagasta. Hubo heridos y detenidos, pocos, pero que salieron hecho mierda de la Comisaría.

El día aquel participé como asalariado, cumpliendo labores comunicativas, y cuando cayó la noche me uní al grupo que identifiqué más rebelde, el de los jóvenes y no tan jóvenes que, entre sorbo y sorbo, y alegría desafiante, resistieron el embate represivo por varias horas, demostrando una espontaneidad combativa notable, y un acabado conocimiento estratégico del territorio por defender. Fue una hermosa comunidad temporal de lucha.

Resultó importante el hecho que los voceros –ya pasaré a referirme a ellos con más detalles- no estuvieron en dicha resistencia, así como el grueso de la población. Pero esto último se comprende: muchxs no conocían las Fuerzas Especiales, nunca habían padecido lacrimógenas, y los chanchos con sus trajes pueden generar miedo.

En esa barricada alegre y vital percibí los gestos políticos más interesantes desde un punto de vista revolucionario, aún cuando los que le daban a la arenga denotaban conceptos setenteros ya recuperados por la izquierda del capital. Sin embargo, los más jóvenes se mostraron dispuestos a discutir sobre los alcances de una movilización como la vivida y la barricada se mostró como un lugar de fraternidad y aprendizaje colectivo de resistencia y digna lucha.

No hubo concesiones con la propiedad privada, arrasando con pallets y planchas de pizarreño extraídas de las empresas para alimentar la barricada. Y, notable, resultó, también, que cuando los chanchos hicieron aparición para el desalojo tipo 2 am, desde lo alto de las empresas, los proletarios presos de los turnos de trabajo, gritaron contra los pacos y en ánimo a los que resistíamos ahí fuera.

Los chanchos dieron con todo y dos jóvenes recibieron bombas en sus cuerpos –uno muy cerca del ojo y otro en su pierna- y otro fue atropellado por el zorrillo en una encerrona. Sin embargo, el fuego duró hasta las seis de la mañana, cuando el último puñado nos retiramos por cansancio. No hubo relevo y se perdió el bloqueo.

ORGANIZACIÓN

Desde un comienzo se reconocieron los liderazgos ejercidos por menos de diez dirigentes transportistas, pescadores, y ambientalistas, quienes tenían trazada de antemano las acciones de fuerza y una cierta postura, que, sin embargo, por presión, fue “democratizándose”.

Nadie los escogió –como supuestamente ocurre en el modelo asambleario- y, por lo mismo, nadie imaginó revocarlos cuando se fueron poniendo demasiado dóciles frente a las promesas gubernamentales. Asimismo, nunca hubo una vocería definida y rígida, y un día aparecían hablando como voceros personajes que luego no asistían a las marchas o a las asambleas.

El único que tuvo un papel protagónico de principio a fin fue el alcalde, Fernando San Román, un joven de 28 años, que no está inscrito pero recibe el apoyo del Partido Progresista (Pro), del payaso llamado Marco Enríquez-Ominami. San Román desde su adolescencia estuvo armando movimientos contra las termoeléctricas, coqueteando con diversos Partidos, y apenas pudo, se postuló a cargos institucionales, consiguiendo la alcaldía con un 35% de votaciones en 2012.

También fundó un periódico, El Polémico, donde junto a varios colaboradores denunció todas las turbiedades de los funcionarios de la antigua administración municipal del DC Moyano. Paradojalmente, hoy esos funcionarios, ubicados en puestos estratégicos, son sus subalternos, lo que le dificulta la gestión debido a sus sutiles sabotajes y omisiones.

San Román era el más claro respecto a los alcances políticos del movimiento y mérito suyo es el haber comunicado a los medios con claridad el petitorio y su fundamentación. Sin embargo, éstos festinaron con su liderazgo, por propia debilidad de los voceros de base, ya que siempre buscan encausar las explosiones sociales a través del discurso de sus ‘líderes’, silenciando siempre la voz más iracunda y espontánea de los dirigentes sociales con menos capacidad retórica.

San Román es un personaje legitimado y de buenas intenciones, pero sus horizontes están demasiado apegados a la real-politik, a la reforma, al “paso a paso”, cediendo entremedio a los entuertos de poder, al amiguismo, en una ambigua posición. Por sus actos e ideas, podemos situarlo en la izquierda del capital que aún mantiene autónoma respecto a la verticalidad partidista, pero que cae fácilmente preso de sus acuerdos instrumentales y políticos.

El problema que atravesó la organización de los proletarios tocopillanos (el 95% de la población) fue la urgencia de la movilización, en fondo y forma. Todo fue apresurado y respondió a las circunstancias a nivel interno. Una de las consignas remarcadas con negrita en un uno de los primeros panfletos repartidos, donde se comunicaba el petitorio, decía algo así como “Esto no es un movimiento político, sino social, luchamos por Tocopilla”.

Esto refleja el descrédito de la política entendida como correlación de fuerzas entre Partidos, donde siempre estos “pequeños estados” intentan sacar ganancia de su hegemonía en los movimientos. De hecho, el personaje conocido como MEO se sintió ofendido cuando San Román pidió que se abstuviera de asistir a la gran marcha del día 9 de agosto, jornada en que el Ministro de Salud y otros peces gordos venidos desde Santiago, visitaron la comuna con la intención de dar solución a las demandas. De todas maneras, acertada petición del alcalde, ya que sus adversarios –incluido los medios como CNN, El Mercurio, y La Tercera- estaban expectantes ante la presencia de políticos o candidatos con vistas a dar la razón a la derecha, que ya sentían internamente que el movimiento buscaba dar hegemonía a ciertos sectores, e incluso paranoiqueaba con que el movimiento “estaba infiltrado por extremistas venidos desde afuera”, como señaló el momio y xenófobo diputado por la zona, Felipe Ward (UDI).

Más allá de esta interpretación, nunca existió el momento a nivel interno, en la asamblea me refiero, para discutir sobre lo que entendíamos por “lo político”, “lo social” y lo “anti-político”. Hubiese sido muy interesante a nivel teórico y práctico llegar a una conclusión general respecto a qué rechazamos de lo político tal como lo conocemos en la sociedad espectacular y reconocernos como sujetos políticos no especializados.

Tampoco hubo tiempo para legitimar mediante votación directa a los voceros y aclararles sus funciones específicas, el mandato, y su potencial revocación al momento que no las cumplieran. Y eso ocurrió por el temor de no provocar discusiones que pudieran dividir el movimiento y por no herir los egos, que se asomaban amenazantes cada vez que uno de los tantos actores representativos (dirigentes vecinales, estudiantiles, trabajadores), por ejemplo, no era citado con mucha formalidad a una de las reuniones o alguien no muy legitimado aparecía declarando por los medios.

Aún cuando varios éramos partidarios de generar esa y otras discusiones en la asamblea, esos momentos eran de organización estratégica y se dejaron de lado las discusiones más “políticas”. Sin embargo, cuando el movimiento tomó conciencia de su potencial, las mujeres pobladoras y otros sujetos iletrados pero con la combatividad que sólo el grandioso sentido común entrega, pusieron los puntos sobre las íes e indicaron un camino donde no había espacio para tranzar, un camino lleno de desconfianza en la palabra de la “autoridad” y que tenía la certeza que la única manera de asegurar la presión era a través de la acción directa, en la intensidad que fuese necesario de acuerdo al momento.

Por otro lado, los sectores juveniles, individuales o agrupados, como los estudiantes, sucumbieron a ser carne de cañón en las barricadas y poco más que eso, ya que los voceros, varios de ellos viejos desconcertados y ex dirigentes sindicales, les negaron un papel más activo e impusieron sus traumas y miedos heredados de la vieja política vertical, negándose o esquivando la democratización directa, la discusión política y la radicalidad bien justificada de los sectores más espontáneos.

PROYECCIONES

De algo están claro todas y todos los tocopillanos: Algo cambió. Hoy la ciudad consigue un cierto reconocimiento y solidaridad nacional respecto a su catastrófico estado, toma conciencia de su poder frente a las autoridades, y perfila futuras demandas.

El grupo de jóvenes más concientes y las minorías radicales convergen en la opción de la acción directa, no institucional, a la vez que confían en la figura del Alcalde, que ha demostrado sentirse cómodo y efectivo negociando directamente con Santiago, lo que a la vez le trajo la consolidación como figura política, augurando un nuevo período en la Municipalidad, aún cuando falta tiempo para eso, y aunque podemos dar fe que no es la motivación de su participación. De hecho, pasó a convertirse en “héroe” luego que resultara detenido en el bloqueo del 1 de agosto, donde, a pesar de su cargo, fue tratado como tratan los chanchos a los detenidos en manifestaciones.

Hoy el pueblo ha vuelto a una relativa calma (los compromiso adquiridos por el Gobierno tienen como fecha tope el 1 de octubre), aún cuando al cierre de este escrito un nuevo bloqueo había acontecido en la ruta hacia Iquique, motivado por la necesidad de obras de mitigación de aluviones productos de la lluvia, en el sector norte, donde están las poblaciones más marginales. Ese bloqueo fue una nueva demostración de fuerza y combatividad, porque desembocó en el compromiso del Intendente de la región para comenzar las obras solicitadas en las próximas semanas. Y, además, demostró que la gente le tiene cada vez menos miedo a la represión policial, develando complejos y radicales métodos de autodefensa, si es que llegaba a contecer el desalojo.

Aunque la presencia fantasmal de un par de troskos que aparecieron en una de las últimas asambleas criticando los liderazgos, para luego desaparecer en el éter de sus organizaciones universitarias, no hubo otro tipo de presencia anticapitalista en el movimiento (si es que consideramos anticapitalista la política trostskista).

Junto a un camarada que me hice casualmente en las barricadas, hemos intentado contactar a los núcleos e individuales del proletariado juvenil (y no tanto) más combativo, aún sin resultados. Por lo mismo, frente a las propias contradicciones a las que se verá sometido el movimiento por los intereses y demandas más radicales que empiezan a asomarse, se hace necesaria la difusión de ideas comunistas anárquicas y el establecimiento de una asamblea no mediada por la urgencia de la movilización, sino como espacio fraterno de discusión de ideas y horizontes en la lucha.

¡Por la multiplicación de los focos locales anticapitalistas y antiestatales!
¡Por la revolución internacionalista contra la sociedad espectacular!
¡Comunismo difuso saboteando el viejo mundo!

Tomado de hommodolars

lunes, 23 de septiembre de 2013

Anarquista chileno habla sobre la Unidad Popular y el golpe desde el exilio en 1977

Nota de MR: El siguiente vídeo fue hecho público hace pocos meses y muestra la opinión de un militante anarquista chileno desde el exilio. Según lo explicita la nota escrita por quien subió el material a Internet, la opinión fue emitida en la región española durante el marco de las "Jornadas Anarquistas Internacionales de Barcelona" en 1977.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Dossier en torno a los 40 años del golpe en chile

A 40 años del golpe: Desmitificar nuestra historia, romper con toda idolatría y continuar la lucha revolucionaria por fuera y en contra de la institucionalidad capitalista.

“En cambio, las revoluciones proletarias (…) se critican constantemente a sí mismas, se interrumpen continuamente en su propia marcha, vuelven sobre lo que parecía terminado, para comenzarlo de nuevo, se burlan concienzuda y cruelmente de las indecisiones, de los lados flojos y de la mezquindad de sus primeros intentos, parece que sólo derriban a su adversario para que éste saque de la tierra nuevas fuerzas y vuelva a levantarse más gigantesco frente a ellas, retroceden constantemente aterradas ante la vaga enormidad de sus propios fines, hasta que se crea una situación que no permite volverse atrás y las circunstancias mismas gritan: ¡Hic Rhodus, hic salta! ¡Aquí está la rosa, baila aquí!” (K. Marx, El 18 Brumario de Luis Bonaparte, 1852)

“La clase que lucha, que está sometida, es el sujeto mismo del conocimiento histórico. En Marx aparece como la última que ha sido esclavizada, como la clase vengadora que lleva hasta el final la obra de liberación en nombre de generaciones vencidas. Esta consciencia (…) le ha resultado desde siempre chabacana a la socialdemocracia (…). Se ha complacido en cambio en asignar a la clase obrera el papel de redentora de generaciones futuras. Con ello ha cortado los nervios de su fuerza mejor. La clase desaprendió en esta escuela tanto el odio como la voluntad de sacrificio. Puesto que ambos se alimentan de la imagen de los antecesores esclavizados y no del ideal de los descendientes liberados.” (W. Benjamin, Tesis de filosofía de la historia, 1940)

“Y si queremos en la próxima revolución dejar las puertas abiertas a la reacción (…), no tenemos más que confiar nuestros asuntos a un gobierno representativo, a un ministerio armado de todos los poderes que hoy posee. La dictadura reaccionaria, roja en un principio, palideciendo a medida que se siente más fuerte sobre su asiento, no se hará esperar, porque tendrá a su disposición todos los instrumentos de dominación y los pondrá inmediatamente a su servicio”. (P. Kropotkin, El gobierno representativo, 1880)

No podemos, como explotadas/os que aspiramos a dejar de ser tales, relegar nuestra historia a la mera cronología de sucesos aparentemente aislados, a la mitificación nostálgica del pasado, a la recuperación ideológica que pretenden perpetrar las decenas de versiones (de izquierda y derecha) en que se presenta el “partido del orden”(1). Nuestra mirada de las distintas experiencias que a través de los años han cuestionado el orden social impuesto, a partir de las cuales se ha llegado a comprender la necesidad ineludible del derribamiento revolucionario de las relaciones e instituciones capitalistas, responsables del mantenimiento de las condiciones de miseria general, debe posicionarse en ruptura con todos esos intentos de deformación histórica, si es que sinceramente deseamos extraer del pasado lecciones útiles para encarar el presente. Esto, por cierto, no significa clamar por una revisión “objetiva” de los procesos históricos. Tal pretensión academicista requeriría situarse en una posición neutral que simplemente no existe. Por el contrario, aspiramos a un examen crítico de la historia que sea capaz de comprender las verdaderas potencialidades que encarnaban ciertos fenómenos y experiencias, a la vez que intenta vislumbrar sus errores y límites, sin dejar de lado el contexto social-histórico dentro del que surgen. Y, ante todo, no buscamos las respuestas a las derrotas de nuestra clase en los “errores” en que las camarillas políticas, arrogándose la representación del “pueblo”, hayan podido incurrir, sino precisamente en aquellas/os en cuyo nombre se pretendía actuar. Es en este sentido que rescatamos la herencia rebelde de aquella experiencia subversiva que agitó las frías aguas de la sociedad capitalista chilena durante los años 60 y 70, obligando a la reacción a utilizar sus recursos más sanguinarios para ponerle freno -como parte de la reacción mundial frente a la gran oleada revolucionaria que sacudió a todo el mundo durante aquel periodo-, mediante el golpe militar y la represión más dura ejercida por los aparatos de seguridad de la dictadura. Lo importante, en cualquier caso, es comprender que tal derrota se vio inmensamente favorecida por la desactivación de las experiencias radicales llevada a cabo por la social-democracia durante los años previos, proceso que compromete a prácticamente todo el aparataje político que se hacía llamar revolucionario, participando directamente en el estado burgués, o actuando como su ala izquierdista “crítica”.

De esta forma, el discurso demócrata oficial, aquel que llama a la “reconciliación nacional”, a la “superación de las divisiones del pasado” para “mirar hacia el futuro”, a juramentar un “nunca más” basado en el respeto a la institucionalidad democrática (por tanto, burguesa), se presenta como un clásico recurso del poder para negar discursivamente cualquier posibilidad de ruptura radical con la reproducción del capitalismo. Y en este sentido, no constituye ninguna novedad. Por lo mismo, no merece el gasto de energía, para los fines que nos hemos propuesto aquí, el desarrollo de una crítica más detallada de las políticas de quienes tan claramente se exhiben como enemigos acérrimos de toda actividad cuestionadora de la miseria existente. Lo que sí se hace necesario es aportar a la comprensión real del papel que todo el sector político conocido como la “Izquierda”, con todos sus matices, jugó y sigue jugando en el mantenimiento del orden social clasista. Desde luego, esto no es tarea fácil de realizar en un medio que cree una misma cosa la crítica y acción anticapitalistas y la pertenencia –doctrinaria y militante- a la Izquierda. Para nosotros/as, no se trata de jugar a ser “más” radicales levantando enemigos donde tradicionalmente se solía ver a “compañeros de viaje”, sino de criticar –incluyendo, por supuesto, la autocrítica- aquellas lógicas relacionales, aparatajes organizativos y convencimientos ideológicos de quienes han históricamente pretendido actuar en nombre de “la clase obrera”, del “pueblo”, “los oprimidos”, o como sea que circunstancialmente nos llamen a las/os explotadas/os, en el intento de transformarse en vanguardia de un movimiento que constantemente les supera. No es este el espacio para llevar a cabo una crítica más profunda, que analice las raíces históricas de la Izquierda como fracción política inherente a un sistema de dominación dado, y que sistematice los argumentos lógicos/teóricos que llevan a comprender al movimiento revolucionario del proletariado necesariamente como anti-político, en el sentido de que sólo puede ser revolucionario, expresando un contenido comunista/anárquico, el movimiento que tienda a romper con todas las separaciones introducidas y mantenidas, mediante el ejercicio de la violencia, por la división clasista de la sociedad humana. Sin embargo, es necesario tener claridad al respecto. Se ha denominado Izquierda a aquel espectro político que pretende (honestamente en algunos casos, de manera descaradamente falsa en muchos otros) defender y representar los intereses colectivos de quienes sufren en carne propia las desgracias de la explotación capitalista (y que según el contexto histórico y la ideología particular, han sido llamados de distintas maneras –trabajadores, campesinos, pobres, oprimidos, populares, etc.). Lo más importante de notar es que la Izquierda existe en referencia a lo político, a la administración de la sociedad –en la inmensa mayoría de los casos, esto implica que tal administración es llevada a cabo a través del Estado. Y dentro de esta gama de expresiones políticas, algunas han sido clasificadas como “reformistas” y otras como “revolucionarias”. En general, tal clasificación se hace en referencia a cuestiones más bien de método que de contenido. Por ejemplo, se suele razonar que “reformistas” son quienes llaman a acudir a las urnas para desencadenar un cambio social que asegure más justicia, igualdad, participación, etc., y “revolucionarios” quienes desean llegar a lo mismo pero por vías insurreccionales. En cualquier caso, existe toda una escala cromática en tal clasificación (desde lo más amarillo al rojo más oscuro). Lo político, la determinación de la administración de la sociedad, es posible si se detenta un poder más o menos centralizado. Es decir, lo político siempre existe, de una u otra forma, y quiéranlo o no aceptar quienes se organizan “políticamente”, en torno al Estado (en la forma en que se presente). De esta manera, si la comunidad humana que pretendemos construir revolucionariamente supone el fin de la dominación de cualquier tipo, y por ende, la abolición de la jerarquización social, el mantenimiento de esferas separadas de actividad humana, especializadas en el ejercicio del poder, sólo puede significar, o bien que el proceso revolucionario fue derrotado, o que aún existen fuerzas reaccionarias en escena. En lo fundamental, esta es la raíz de la necesidad de un movimiento que niegue y supere la política, tanto oficial como pretendidamente revolucionaria. Ahora, esto no nos lleva a la ceguera de meter en un mismo saco a todas las expresiones que se han identificado como políticas. Debemos ser capaces de descubrir el contenido real de los fenómenos sociales y las propuestas de acción generadas, aquí y en todas partes del mundo, más allá de las palabras a las que recurran para su expresión. Así también, debemos diferenciar aquello que se presenta como una forma de cooptación determinada directamente desde la clase dominante, con el fin de contener el auge de la crítica social en actos, de lo que constituyen expresiones auténticas de la clase en su búsqueda de una interpretación más acertada de su realidad inmediata e histórica, expresiones que, por cierto, pueden y deben también ser criticadas. Por tanto, una cosa es atacar los intentos de cooptación del poder, y otra es la crítica –todo lo dura y frontal que se requiera– a los intentos de traducir la propia lucha en el lenguaje de la ideología dominante. Y lo que ocurre, casi siempre, es que estas dos situaciones se entremezclan. Lo que se acentuó, de hecho, durante el gobierno social-demócrata de la UP.

En definitiva, el papel desempeñado por la Izquierda (institucional y “revolucionaria”, voluntaria o involuntariamente), en contextos de gran agitación social y aparición de fisuras en la reproducción del sistema capitalista, no es otro que el de contener el empuje y la creatividad de la clase en lucha, secuestrando su representatividad y dispersando su potencial revolucionario en formas de “enfrentamiento” dóciles y en objetivos formulados en la lógica de la ideología dominante. La Izquierda, que es la Izquierda del capital, no busca otra cosa que la administración más justa de la explotación capitalista, y cuando se muestra incapaz de contener el avance proletario, que vislumbra los límites de la práctica que las ideologías y organizaciones partidistas le asignan, que empieza a comprender sus reales posibilidades y a generar consciente y autónomamente las herramientas coherentes a sus necesidades de emancipación, es entonces cuando la dinámica del capital saca a relucir todo su arsenal del terror para ejecutar un papel represivo mucho más directo. La burguesía nunca se ha limitado a la hora de recurrir a la violencia política sistemática, ejercida ya sea directamente por sus cuerpos de orden y seguridad, como por organismos exclusivamente creados para la expansión del terrorismo de estado, cuando sus intereses se ven en peligro inminente. En tal sentido, la dictadura no surge contra la democracia; es la continuación de su tarea cuando ésta se muestra impotente, o cuando la aplicación de cambios drásticos en la estructura y forma de la explotación capitalista es requerida, procesos que suelen ir de la mano.

Cuando la cooptación se muestra insuficiente, sólo queda a disposición la “razón de la fuerza”. El golpe del 11 de septiembre tiene entonces que ser entendido como un ataque del capital a las luchas proletarias que se intensificaban y multiplicaban, en muchos casos criticando y superando explícitamente a la UP, la que a pesar de desarmar las experiencias más radicales, se mostraba incapaz de mantener el orden capitalista, orden que en lo fundamental jamás se propuso poner en tela de juicio. Obviamente, entran en juego siempre los intereses particulares de distintos bloques o grupos, siendo notorio el apoyo norteamericano a las maniobras golpistas de la derecha política. Pero tras las luchas espectaculares entre izquierdas y derechas, se encuentra la continuidad de la reacción burguesa al desarrollo del contenido comunista que las luchas proletarias van gestando. En dicho proceso, es innegable, como ya dijimos, que muchas y muchos militantes que desarrollaron una interpretación más lúcida de la realidad social, formaron parte de alguno de los partidos que pretendía ser revolucionario. Esto, sin embargo, debe ser matizado. Los mismos testimonios de estos militantes dan cuenta de cómo eran incapaces de dirigir las experiencias autogestionarias que se multiplicaban.

Hoy, desde los alegatos tímidos de los sectores que se suman a la institucionalidad gobernante, pidiendo “Justicia” para que exista una “democracia madura” (y a través de los tribunales burgueses, claro está, constituyendo ésta más bien un recurso retórico que una exigencia real), a los clamores por reconstruir la “unidad de la Izquierda desde abajo”, tomando como molde directo a la UP, eso sí, reparando sus “errores”, encontramos un mismo hilo conductor, una misma esencia ideológica y programática: creer que avanzamos al socialismo mediante la acumulación de reformas, que la economía puede ser más justa y que la democracia se puede profundizar. Y todo esto, cuando se reconoce que no es el “ideal último” al que se aspira, sino una cuestión de estrategia, se hace en base a la imposición de límites a las propias capacidades del proletariado en su conjunto de realizar una crítica radical y de generar experiencias, espacios y relaciones profundamente distintas y opuestas a las que se replican desde la sociedad capitalista.

Por todo esto, hemos decidido reunir los siguientes textos en esta recopilación en torno al golpe del 11 de septiembre, que repasan la labor de la social-democracia durante la UP e intentan recoger las contradicciones que se explicitaban en dicho proceso, tendiendo a la crítica y superación de los márgenes reformistas e institucionales. Más allá de todas las diferencias expuestas, el dolor desatado por la represión sanguinaria de la dictadura (ya sea contra cuadros políticos, activistas sin partido o personas sin militancia) es también nuestro, y cada una de las vidas cobradas a manos de pacos, milicos y agentes de los aparatos de “inteligencia” constituyen una razón más para avanzar hacia la destrucción de este sistema aberrante. Se aproxima el momento en que aquellos que mantienen este mundo de miserias se enterarán de que, tal como les advirtiera el anarquista Paulino Pallas hace más de un siglo, antes de su ejecución, “la venganza será terrible”.

(1) A decir de Marx, durante los sucesos revolucionarios que dieron forma a la Comuna de París, todos los estamentos reaccionarios de la sociedad se habían unido en un “partido del orden frente a la clase proletaria, como partido de la anarquía, del socialismo, del comunismo.” (K. Marx, El 18 Brumario de Luis Bonaparte, 1852)

Textos incluidos en el dossier:

- Extraña derrota: La revolución chilena, 1973. (PointBlank!)
- Lúcida intervención de un compañero en una asamblea de la CUT en las postrimerías de la UP.
- Comunicado ‘vopista’ luego de la represión de la UP tras el ajusticiamiento del demócrata-cristiano E. Pérez Zujovic, responsable de la masacre de Pampa Irigoin.
- A profundizar la ruptura total con la sociedad de clases. (Redes por la Autonomía Proletaria -RAP)
- El fin de la UP y la reemergencia del proletariado. (Extracto; Grupo Comunista Internacionalista -GCI)
- Carta de los Cordones Industriales a Salvador Allende.

miércoles, 14 de agosto de 2013

Declaración de inicio de Huelga de Hambre de Hans Niemeyer

“Como una consecuencia del mantenimiento del orden interior se hace necesario dictar preceptos para asegurar el completo y perfecto ejercicio de libertades individuales y todos los derechos que especialmente garantiza la Carta Fundamental; pues sin el ejercicio de estos derechos, el orden vendría a ser tiranía y despotismo”

(Mensaje del Código Penal chileno, 29 de octubre de 1873)

“Dígase lo que se quiera; lo fundamental es mantenerse y conservar el buen orden del Estado”

(Napoleón, Comentarios a El Príncipe, de Maquiavelo)

El viernes 12 de julio del presente año, el Séptimo TOP de Santiago dictó una condena en mi contra por un atentado explosivo ocurrido en noviembre de 2001 a 5 años y 300 días de prisión efectiva, sin derecho a beneficios por infracción a la ley de control de armas y explosivos y el delito de daños.

Esta condena concitó la alegría y los aplausos de la derecha, el gobierno y el duopolio de la prensa escrita, donde incluso el diario El Mercurio se permitió dar una vuelta de tuerca más en su sibilino y venenoso estilo, mintiendo desvergonzadamente en un artículo de la periodista Leslie Ayala y en una posterior editorial señalando que mi ADN estaba presente en otros 3 atentados explosivos por los que fui acusado y absuelto.

El Ministro del Interior Andrés Chadwick, un fascista de Chacarillas, calificó la pena como ejemplar y aplaudió rabiosamente. Estas reacciones sólo demuestran a confluencia de las distintas facciones del poder en la estrategia contra lo que ellos denominan como su nuevo enemigo interno, dentro de lo que podemos contar a la UDI, el Ministerio del Interior, el Ministerio Público y la prensa hegemónica, cada uno cumpliendo su misión.

Tampoco puede desconocerse el hecho de la venganza por parte del Estado por haber estado casi 5 meses prófugo, desde el 7 de diciembre de 2012 al 26 de abril de 2012, al ejercer mi derecho a rebelión al encontrarse el juicio suspendido en el Tribunal Constitucional y pretender mantenerse la prisión preventiva, lo que configuraba una situación arbitraria e ilegal que la mayoría de la prensa calló.

Sin embargo, esta sentencia, al tener un trasfondo político y supuestamente aleccionador, ha incurrido en graves situaciones de ilegalidad que atentan contra el debido proceso y los derechos establecidos constitucionalmente, ante esta inaceptable situación, agravada por el hecho de que en un procedimiento disciplinario de Gendarmería de Chile se decidió castigarme por el hallazgo de un cuchillo en una celda que comparto con otras 3 personas privándome de toda visita por el lapso de 3 semanas, sólo me queda enfrentar con mi último recurso que es el inicio de una huelga de hambre líquida desde el día 13 de agosto, de carácter indefinido.

Los objetivos de esta movilización son los siguientes:

1. Denunciar públicamente la flagrante ilegalidad y violación al debido proceso ocurrida durante el juicio oral en mi contra llevado a cabo por el Séptimo Tribunal Oral en Lo Penal, que significó haber valorado las declaraciones del testigo Cristián Pérez Mancilla, oficial de la Dipolcar, quien no declaró ante la Fiscalía durante la investigación, contraviniendo lo dispuesto en el artículo 181 del Código Procesal Penal; además, la ilegalidad que significa aplicar un doble castigo en la sentencia dictada por el Séptimo Tribunal Oral en Lo Penal al condenarme por la ley de control de armas y explosivos y luego por el delito de daños, aplicando 300 días de prisión efectiva considerando el hecho de haber ocupado un artefacto explosivo casero de bajo poder como un agravante, en circunstancias que ese hecho ya ha sido sancionado al aplicar la ley de control de armas y explosivos. En la práctica, esta situación constituye un doble castigo por un mismo hecho, y fue la única manera en que el Poder político se asegurara de aplicar una pena efectiva, evidentemente desproporcionada, y que resulta mucho mayor que la que se aplica todos los días por delitos contra las personas. El problema es que en su ejercicio matemático de acumulación de penas este Tribunal violó principios básicos del derecho penal, y que en lo relativo a lo que los abogados penalistas llaman “prohibición de doble valoración”, resulta una obligación clara dirigida hacia los jueces en el artículo 63 del Código Penal vigente.

2. Denunciar públicamente al diario El Mercurio y a la periodista Leslie Ayala, quienes en una editorial del día jueves 18 de julio y en su artículo del sábado 13 de julio, mienten groseramente al señalar que mi ADN estaba presente en los otros 3 atentados y por los que fui absuelto, esta afirmación es absolutamente falsa y jamás algo así, ni nada que se le parezca, fue afirmado por perito alguno y nada hay al respecto en la carpeta de investigación, aun con el carácter sesgado y parcial que tuvo está.

(Nota HD: Clikear y ver imagen de lo que puso la periodista, aqui pueden ver un extracto del lloriqueo de El Mercurio donde dicen la misma imbecilidad con el titulo ¿funciona la ley antierrorista?...para que vea que las editoriales no tienen ni sustento, puede revisar la sentencia aki donde por más que buscamos esa afirmacion...no la encontramos )

Este hecho, sin embargo, no debiera llamar la atención, toda vez que se suma a una larga lista de irregularidades y tergiversaciones que ha realizado El Mercurio al cubrir mi caso y que no pueden hacer sino concluir que existe una desigual campaña en mi contra de parte de ese diario. Sólo recordemos cuando El Mercurio accedió a la carpeta de investigación cuando ésta estaba en etapa de secreto y mi defensa no podía tener acceso a ella. Esa vez también fue para mentir, denunciando un imaginario vínculo con Luciano Pitronello, hecho ni siquiera mencionado en el juicio. El segundo hecho ocurrió cuando el inescrupuloso Fiscal Raúl Guzmán filtrara al diario El Mercurio el informe pre-sentencial de Gendarmería, un día antes de los alegatos finales del juicio y antes de ser presentados al Tribunal y a la defensa.

3. Denunciar el trasfondo político del juicio, en que se ocupó la aplicación del derecho penal para dar una señal ejemplar para los delitos relacionados con atentados explosivos como lo reconoció el propio Ministro del Interior Andrés Chadwick.

A lo anterior se agrega la decisión de Gendarmería de Chile de mantenerme recluido en un módulo distinto a aquel en que se llevaba a efecto mi encierro hasta el 7 de diciembre del año pasado, y en que las condiciones mismas de sobrevivencia de los presos implica una violación flagrante de derechos y garantías proclamados por las propias leyes y la Constitución, que genera un clima de insanidad y violencia acicateado por allanamientos de Gendarmería donde el negarse a acusar a otros tiene por consecuencia que la sanción se aplique necesariamente sobre quien mantiene esa dignidad humana mínima. Se busca ejemplarizar así hacia dentro y hacia fuera de la prisión, en un claro mensaje de reforzamiento del control y el sometimiento.

Llama la atención que la resolución del Tribunal que autoriza la aplicación de este castigo adicional (¿cuántas veces me han castigado ya por los mismos hechos?), aluda a que la razón de ser de éste sería “el hallazgo de un arma blanca en el sector en el cual habita”. Resulta evidente que acá no estamos ante lo que los juristas llaman “debido proceso”. Y es más: se supone que a en el Derecho penal no se sanciona a personas, sino que a actos.

Es por eso que hago un llamado a familiares, amigos y personas solidarias de cualquier parte del mundo a hacerse parte de la denuncia de estos puntos y la represión que lleva a cabo el Estado chileno contra los disidentes a los que considera enemigo interno, a apoyar mi movilización exigiendo: la revisión del juicio por la Corte Suprema; la reducción de la pena impuesta y concesión de penas sustitutivas de cumplimiento en libertad, y en un plano inmediato, el traslado al módulo J de la Cárcel de Alta Seguridad en lo que quede de proceso y condena.

HANS FELIPE NIEMEYER SALINAS

12.455.327-K

CARCEL DE ALTA SEGURIDAD, Sección de Máxima Seguridad. Pedro Montt 1902, Santiago


Tomado de Hommodolars

domingo, 21 de julio de 2013

[Documental] "Montaje: Caso Bombas"


Muchos estados y gobiernos, amparados en la impunidad que les otorga el ejercicio del poder, han recurrido a los montajes como arma política para desacreditar, invalidar y encarcelar a sus detractores. Pero, ¿qué es un montaje político y policial?, ¿cómo se hace?, ¿quienes los hacen? Esas preguntas son las que aborda este documental, elaborado de manera colectiva por el Canal Barrial 3 del Barrio Yungay, que tiene como telón de fondo y principal referencia el montaje llamado "Caso bombas", articulado contra el mundo anarquista y las casas okupa en el Chile de la "transición a la democracia".

jueves, 20 de junio de 2013

Réquiem por la luna que se fue (Hans Niemeyer desde la prisión)

Réquiem por la luna que se fue

"Escribo para no reventar, por temor a la muerte lenta y a la gangrena de la amnesia, en la que se pudre toda una generación" - Jean Marc Roullian-

"Sin cadenas sobre los pies, me puse a andar"- Los pericos-

I. La Detención.

Eran las 7:30 de la mañana cuando detectamos movimientos de personas extrañas en la calle, abajo, a ambos lados del edificio. Personas que parecen estudiantes, transeúntes habituales del barrio, pero que caminan mirando insistentemente hacia el departamento en el que hemos buscado refugio. ¿Podrá ser una percepción errada, esa sensación de persecución que impide ver con claridad lo real de lo imaginario? Esta vez, sin embargo, sabíamos que estábamos en falta, sabíamos que habíamos cometido un error. Otras veces también había pasado, también habíamos caminado por el delgado filo de lo que no se debe hacer, pero a veces no quedaba otra opción, había que dar el paso y apostar a que el enemigo llegaría tarde. La dinámica del huir, con las dos policías (1) detrás nuestro, con un niño pequeño con nosotros, con el dinero justo, está llena de estas pequeñas apuestas, de saltos al vacío. ¿Nos abrirán la puerta?¿Nos pedirán que nos vayamos?¿Nos habrán reconocido? El Bus está detenido, los pacos están abajo... ¿Subirán? ¿Pedirán cédulas de identidad?¿Vendrán a revisar las cámaras de este cajero? Sacamos dinero y nos vamos....no hay nada ¿Que hacemos ahora? Hay cosas que no pueden faltar: pañales, leche para el pequeño colibrí, como cariñosamente le decimos nosotros. ¿Cuánta comida nos queda?

Hoy nos comemos los tallarines, mañana pura sopa y pan, no importa, mientras "pequeño" esté bien podemos seguir. Hubo días que no hubo que comer, improvisamos un pan con un poco de harina que encontramos, sal y aceite que quedó bastante bueno, más la única palta madura que rescatamos de ese palto rebosante de paltas duras como palo. No me importa, estamos los tres, eso nos mantiene, la carpa es nuestro refugio, nuestro hogar...tírale otro saco de dormir encima, que no pase frío. Salgamos un rato afuera, mira los cerros, el bosque oscurísimo, el cielo, nunca había visto un cielo con tantas estrellas, más bello aún con ustedes dos. ¿Sabes que sólo por este instante todo ha valido la pena?¿Recuerdas la consigna que nos inventamos? "Hay cosas que no se olvidan jamás y sólo por eso vale la pena vivirlas". Mañana veremos qué hacemos, cómo solucionamos. Se va improvisando por el camino.

Claro que esto no lo saben los que opinan detrás de un computador, los que tienen vocación de jueces sin sueldo, los que siempre saben qué había que hacer, prestos a juzgar y pontificar. Debió salir del país; debió andar solo; esta weá no es pa andar con la mina.¿Cómo les da la pana (2) para opinar? ¿Qué saben de nosotros? Coinciden con el enemigo pateando al derrotado. Del otro lado, el vespertino La Segunda clama alarmando. Por su boca hablan los policías y fiscales como siempre, "Está en Grecia, España o Italia", "no tiene arraigo, no tienen patria, no volverá a ver a su familia, si ni siquiera se sabe dónde vive". Los terroristas de corbata opinan, amenazan, construyen mediáticamente al enemigo público. "No sé cómo puede tener familia alguien que piensa sólo en destrucción", opina de mi un fascista-ciudadano comentarista de EMOL (3). No ve contradicción en aceptar los estudiantes muertos, la represión, los niños mapuche baleados, la gente a la que el banco les quitó su casa. No, esta gente se aplaude frente al espejo, la gente partidaria del "Balazo en la cabeza, que se pudran en la cárcel, que los desaparezcan y listo, cómo se echa de menos a Pinochet todo el mundo me lo dice, con el tata a este terrorista lo fusilan in situ, queremos vivir en paz hasta cuando con estos delincuentes, más encima hay que darles de comer con nuestros impuestos, escoria de la sociedad, una isla en el sur, trabajos forzados para que aprendan a trabajar". Las fabricas de opinión pública y de producción de sentido común son sumamente efectivas, y cuando no funcionan están las pistolas de la democracia policial.

¡Pero habitualmente funcionan! Eso es la hegemonía, es ganar el sentido común, disciplinamiento automático, internalizado, sin necesidad de coacción..."en toda sociedad las ideas dominantes son las de la clase dominante" clama el viejo Marx, "quien teme a la libertad, siente orgullo de ser esclavo" susurra amargo Bakunin mientras apura un vodka y recuerda sus años encadenado por la cintura. ¡A quién le importa!, Va a comenzar el matinal, el último caguín de la Fiera, qué dirá la fascista de pelo morado, la Raquel es una dama (se identifica con ella). A quién le importa...va a comenzar el matinal, los presos también lo ven.

Creo que ahora sí son ellos. Vámonos de aquí. Nos vestimos de golpe. ¿Y si voy a comprar pan y aprovecho de ver? Ya anda. Pero ya siento que la trampa se comienza a cerrar, los veo de nuevo por la ventana, no hay duda, son ellos, hablan por celular, coordinan el último zarpazo, piden instrucciones, sí señor está aquí, la esposa acaba de salir, vamos a entrar señor. Vuelves. Está lleno, me dices. Voy a salir, voy a tratar de romper (Lo pienso pero no te lo digo). ¡No! Caes al suelo, lloras, todo es por mi culpa, soy tan tonta, yo lo único que quería era verte, perdóname. Mi amor, tranquila que no te vean llorar, tranquila si voy a estar bien, todo se adelantó algunos días, siempre digna, tranquila, no les des el gusto que te vean llorar. Entran en tropel, la trampa se cierra con un chasquido. Ya están aquí, me toman, tranquilo ya terminó. Palabras de policía ¿Estamos claros, estamos claros? Revísalo, revísalo está desarmado señor, trae pulseras gritan, se ríen, se abrazan y felicitan. No llores, acuérdate de los momentos que pasamos juntos, valió la pena...no llores.

Me bajan por las escaleras esposado por delante ante la mirada curiosa de estudiantes de la Usach y vecinas. Más tarde alguna moverá su ponzoñosa lengua bífida con los periodistas-policías de La Tercera. Un policía me dice "bájate las mangas para que no se te vean las esposas", le respondo "no tengo nada de qué avergonzarme, muy por el contrario". Todos los policías graban el estelar momento con sus teléfonos celulares, al igual que cuando estaba esposado por la espalda a un poste en el cuartel de la Bicrim-Macul. También está presente una misteriosa cámara profesional operada por policías, al parecer se trata de rati TV porque nos acompaño durante todo el "proceso" hasta el cuartel de la Bicrim La Reina luego al tristemente célebre cuartel Borgoño, ex guarida de la C.N.I (Policía política de Pinochet) hoy rebautizado Cuartel Independencia para borrar las reminiscencias dictatoriales, la gente colgada en "Pau de arara" (4) y los aullidos de las torturas, sobre todo ahora que los cómplices del terrorismo de Estado están en el gobierno y en el parlamento, quienes todavía hoy aplauden el horror son los mismos ciudadanos de bien que piden las penas del infierno para "los terroristas". Aunque parece que a veces los ecos del pasado vuelven solos, como quedó demostrado hace unos días cuando agentes de la Brigada de Robos Oriente secuestró y torturó en su cuartel a un estudiante secundario. Es que a la cabra le tira el monte. Entre los presos, esa unidad de la PDI es conocida por su gusto por la "parrilla" (5) y las torturas. El hecho del estudiante secundario provocó incluso que un juez de un tribunal de garantía hablara de "métodos propios de una dictadura" lo que provoco la furia del Ministro del Interior, el fascista de Chacarillas (6), Andrés Chadwick Piñera, quien criticó duramente al Juez. ¡Habráse visto semejante insolencia, que un Juez se permita criticar a los criminales al mando de Chadwick y defienda a un adolescente de las torturas! Como se ve, el desparpajo que tiene este gobierno a la hora de intervenir con las decisiones y hasta los comentarios de un juez cuando éstos no le gustan no tiene límites. Ya no se cuidan ni siquiera las formas, como cuando se solía decir "el gobierno no comenta decisiones judiciales". No, eso ya es pasado, hoy la intervención es abierta y descarada. ¡Y las cosas pasan coladas...nadie dice nada!.

Me introducen en un auto de la PDI me revisan nuevamente, me esposan a la espalda y partimos a toda velocidad en comitiva por General Velásquez y luego Costanera Norte rumbo al cuartel de la Bicrim la Reina. Hay varias llamadas telefónicas de coordinación; antes ya había escuchado urgentes llamadas a la jefatura de la PDI. Imagino a Chadwick recibiendo la noticia en su oficina, una sonrisa se le dibuja entre los glúteos de la cara felicita al Director General. Pero no puede perder tiempo, tiene mucho que hacer y rápidamente se pone su traje de Coronel de la UDI, debe defender a Golborne por zoquete y poner a un hombre con el ADN de la UDI, Pablo es el elegido, al fin un político y no un vendedor de multitienda, piensa don Andrés. Recuerda las antorchas y se ve subiendo por el cerro, en la cima el General que les dirigía un discurso que ha escrito Jaime..qué tiempos aquellos. Pero en fin, las cosas cambian, no hay tiempo que perder, el país nos llama, ¡Hay una obra que defender! Y enérgico le ordena a su chofer "rápido, a calle Suecia!"

Seguimos a toda velocidad por la Costanera Norte rumbo al cuartel. Entre medio desaparece personal "extraño" de la PDI, que no vi nunca más. En el cuartel soy mantenido en la oficina del comisario y, aparte de la custodia que tengo, sólo entran a verme el jefe, el subjefe de la Unidad y el subcomisario que dirigió la operación. Me mantengo tranquilo y en silencio, tratando de ahorrar energía para lo que viene. De pronto me trasladan a un comedor, me sacan cinturón y cordones y nuevamente Rati TV me graba desde distintos ángulos. Tengo el dudoso privilegio de ser su trofeo de guerra. Una serie de ratis viejos entran a mirarme. Esto ya había pasado para mi primera detención en Noviembre de 2011; cuando pasan cosas así vienen jefes activos y en retiro a mirar la presa de caza. Se van.

Se abre la puerta nuevamente, el subcomisario me dice que va a permitir que vea a mi madre cinco minutos. Entra mi mamá, hace 5 meses que no la veo, trae una mezcla de tristeza y alegría. Nos abrazamos. Tranquila mamita, está todo bien. ¿Como te han tratado?. Bien mami, tranquila. ¿Cómo está pequeño?¿Está en tu casa? Conversamos cinco minutos, me quitan las esposas para que pueda tomar las manos de mi madre. Entra el subcomisario: "Hans nos tenemos que ir". De nuevo las esposas y le digo: "No es necesario que vayas al tribunal, para qué te vas a exponer, los buitres estarán ahí". No, hijo, voy a ir igual. Un beso y nos vemos.

Sale de nuevo la comitiva de los profesionales del grillete. Se escucha por la radio: "Sin balizas y medidas máximas de seguridad", algo que volveré a escuchar en el kafkiano viaje carcelario que vendrá. Por el momento, de nuevo endilgamos por Costanera Norte en dirección al Poniente hasta la guarida de Borgoño. Entramos por Santa María, ribera Norte del río mapocho, bajamos del vehículo, a lo lejos cámaras de TV, sin embargo algunos fotógrafos están dentro del cuartel. La Segunda de esa tarde llevará esa foto sacada a un metro de distancia. ¿Alguien dijo convivencia entre la policía y la prensa?. (Nota: Ver aquí la foto)

En el cuartel lo de siempre, fotos de frente y perfil, llenado de papeles y procedimientos burocráticos. Exámenes médicos de rigor entro en pelota, lo lamento por la doctora, la noche anterior venía llegando de una larga caminata por un cerro cercano a Santiago y mi aroma no es el mejor. No alcancé a ducharme. La doctora intenta describir el enrojecimiento de mis muñecas por las varias horas de esposas en las manos. Le pregunta al policía cuál es el término exacto para eso, ¿Esposas?. El policía le responde "nosotros preferimos decirle pulseras": La doctora lo mira varios segundos. Seria. Finalmente escribe en el papel: "Enrojecimiento en ambas muñecas por uso de esposas". Diálogo digno de Maxwel Smart en el Súper agente 86. Firmo algunos papeles más y veo entrar a Rodrigo y Julio, mis abogados. Un breve altercado entre Rodrigo y el Comisario para qué nos deje parlamentar solos. El rati mirará de lejos, pero dice que es imposible que nos deje solos. Nos damos un abrazo, saludos y sonrisas. Pregunto por mi esposa, mi hijo y mi madre. Les pido que trasmitan tranquilidad. Nos ponemos de acuerdo en dos o tres cosas y me explican lo que vendrá en el tribunal. A hora viene la parte del Show. Me esposan a la espalda y me muestran a la prensa. Es un día gris y todos los periodistas, camarógrafos y fotógrafos usan ropas de abrigo oscuras. Subidos arriba de sus móviles ahora si que parecen buitres. Nos vamos en una comitiva de dos vehículos, de nuevo el rati al mando ordena "máximas medidas de seguridad". En el vehículo que voy, los policías se muestran entusiastas ante la cantidad de prensa y dicen: "ahora quedamos inmortalizados"....la vida da pequeñas alegrías a estos pequeños funcionarios. Quieren compartir su minúsculo momento de gloria conmigo: "pareces artista de cine", me dice el jefe. Los miro. De cierta manera me dan un poco de lástima.

Esta vez nos vamos con balizas, ulular de sirenas y a toda velocidad. El jefe llama por teléfono continuamente y recibe llamadas y mensajes. Todos son unos enfermos por los celulares de última generación, uno de los tantos gustos que comparten con los delincuentes. En una de esas llamadas se comunica con el subcomisario Valenzuela, quien dirigió la captura, y le indica que lo llamará "el numero uno" para felicitarlo, y ojo que cuando llama -le advierte- dice "habla Vásquez" (7), para que estés atento y no creas que te están agarrando pal hueveo.

Llegamos al centro de "justicia", Pedro Montt con Panamericana, a la inconveniente hora de almuerzo, de tal manera que no reciben detenidos. Gestiones y llamadas hacen que abran la puerta, pero tenemos que esperar. Llega un mayor de Gendarmería: "¿Este es?" le pregunta, "Sí él es", contestan. Escucho que los funcionarios están en colación pero que nos van a atender un poco antes de las 14:00 horas "para que sea el primero que pase a control de detención". Los fiscales y querellantes ya se encuentran en el Centro de "Justicia" con cubiertos y servilletas al cuello, listos para servirse su presa de caza. Me mandarán a prisión y podrán dormir tranquilos.

La audiencia de control de detención fue lo que era predecible. Lleno de buitres en busca de abatimientos y una derrota que no encuentran. Cuanto les gustan los gestos de vergüenza, las cabezas gachas, los vencidos y los que consideran que han hecho algo malo. El arrepentimiento, en una palabra. Lo necesitan para reafirmar su orden. Necesitan decir: Nosotros los buenos somos finalmente los que triunfamos. Que todo el mundo tome nota. Necesitan que los malos, los portadores de lo patológico, los transgresores de lo normal, sean "los otros", el enemigo, los delincuentes, lo criminales. La delincuencia opera de manera tan poderosos en la reafirmación del orden social imperante como la única sociedad posible, que no puede considerarse simplemente como el reverso de la medalla del modo de vida de las personas "normales", de los ciudadano "buenos y honrados", no es sólo una innata tendencia a la maldad de algunos seres humanos desviados o la cuota de anomalía que posee todo sistema social. El sistema necesita generar y acrecentar la delincuencia, enarbolar el fantasma de la criminalidad. La delincuencia y la configuración de los múltiples enemigos púbicos es, en los escenarios de crisis social como se encuentra Chile, de vital importancia para la construcción de los discursos de legitimación del orden y en la anulación de los discursos disidentes subversivos. Necesita de esos enemigos públicos, de esa amenaza, para llamar a la unión frente al caos, la violencia y la barbarie en la que confluyen delincuentes, encapuchados, anarquistas, agitadores y mapuche violentistas. Y eso que no estamos considerando las ingentes cantidades de dinero que mueve el negocio de la seguridad, de los guardias, cámaras de vigilancia, etc.

Un buen ejemplo de construcción del enemigo público lo constituyo el discurso del 21 de Mayo de Sebastián Piñera Echeñique, en que puso de aviso al país que en Chile existe terrorismo. Además aludió directamente a los mapuche y exigió la aprobación de la Ley Anti-encapuchados. Toda la vida el miedo ha servido para unificar y es justamente lo que intenta el sistema en la actualidad: generar cohesión social.

Hagamos un pequeño paréntesis. Amplios sectores de la clase dirigente chilena consideran que las cosas no están para tomárselas a la broma. Lo que está en juego es importante, es la continuidad del proyecto histórico y del orden económico social que inicio la dictadura y que se profundizo con los gobiernos de la concertación además de ganar legitimidad democrática, que era el ingrediente que le faltaba. Sienten que hay un resquebrajamiento del consenso respecto al sistema de dominación o, al menos, del tipo de capitalismo que ha predominado hasta ahora. Hay, además, sobre la mesa ciertos indicios inquietantes. Nombremos sólo algunos: Paralización o entorpecimiento (en algunos casos por decisión judicial) de importantes proyectos de inversión extranjera ya sea en el ámbito energético o de la minería; baja en el precio internacional del cobre; aumento en los costos de producción de los yacimientos de Codelco; fragilidad en el sistema energético, principalmente generación y trasmisión eléctrica; indicios de ralentización de la economía china. Todos estos elementos han encendido las alarmas de la clase dirigente. Y es en este contexto de crisis en el que se desarrollan las dos fallas estructurales del sistema de dominación chileno: La crisis del sistema de representación política por un lado y la distribución del ingreso y concentración de la riqueza por otro. Todas las protestas sociales: el levantamiento en Magallanes, Aysén, Freirina y en los últimos días, Quellon en Chiloé, la insatisfacción por los llamados "abusos" , la problemática educacional, la problemática medioambiental se encuadran de una u otra forma en estas dos fisuras estructurales antes mencionadas. La apuesta de la clase dirigente y de la clase política es que la salida a este escenario de conflictos sea una reforma en alguno de los grados que proponen los defensores del status quo. Recordemos que dese Bachelet a Longueira proponen reformas. La clase dirigente chilena sabe que la plutocracia con representación política restringida no puede mantenerse como está, que el cielo con tasas de ganancia altísima a la que estaban acostumbrados, de concentración de la riqueza, no podrá mantenerse. Saben que tienen que soltar la mano, a riesgo de abrir espacios de incertidumbre y posibilidades de reventones sociales. Es por eso que la clase política en sus distintas variantes, repite la cantinela del "chile cambió".

Aún cuando lo más probable es que haya salidas dentro de los marcos del sistema, la situación está en evolución, "el escenario esta liquido" dicen los analistas. Es por eso que el gesto de Piñera el 21 de Mayo de levantar el fantasma del terrorismo y el caos social, adquiere el mayor sentido político. Esta faceta tiene antecedentes, por cierto, en el discurso y actuación de Rodrigo Hinzpeter como ministro del interior, pero los últimos hechos de importancia son los relacionados al atentado mortal al matrimonio Luchsinger-Mackay y la arremetida represiva que ello implico.(8) El resurgimiento y potenciación del discurso contra el fantasma del terrorismo será, pues, el telón de fondo en que se desarrollaran los procesos judiciales, con claros ribetes políticos, en que el Estado se encuentra involucrando la cuestionada ley Antiterrorista. En todos estos casos, aparte de desarrollar procesos judiciales que, en la practica, se atenta contra el debido proceso, el derecho a la defensa y la presunción de inocencia que tanto cacarea el sistema, se ocupará el linchamiento mediático y la exacerbación del populismo punitivo para obtener réditos políticos en un año electoral. El panorama, seamos sinceros, no se ve nada bien. Prueba de ellos es la cantidad de mentiras y acusaciones falsas de las cuales se hace eco la prensa oficial y que tienen como fuente el Ministerio publico y las policías. La "Verdad" y las pruebas directas en este contexto, pasan a un segundo plano y comienza a tener preeminencia la razón de estado y la necesidad de lograr condenas por Ley Antiterrorista que le permitan al Estado alinearse con los nuevos escenarios del conflicto social.

Pero volvamos al relato. Fecha de juicio: Lunes 17 de junio. ¿Lugar de detención? Lo decidirá gendarmería, dice el presidente del Séptimo tribunal oral en lo Penal. Así se inicio un curioso y surrealista viaje por diferentes lugares de la institución carcelaria.

II Periplo por Santiago1

El grupo TAR (Traslado de Alto Riesgo) de Gendarmería me conduce por los túneles subterráneos hacia la cárcel de Santiago 1. En el camino recuerdo que se trata de una cárcel concesionada, obra maestra de la Concertación, veremos la eficiencia de la empresa privada incursionando en materia carcelaria. Soy recluido en un calabozo solo, no quieren que esté con otros presos. Como salí en la tele (y para los presos "sonar" en la prensa es importante), algunos preso me saludan y me dan la mano a través de la reja. Camino durante horas por el calabozo (tiro huincha) que está frente a Estadística y oficinas administrativas de esta gente. Se comienzan a dar una serie de situaciones extrañas, oficiales de Gendarmería hablan entre ellos y me miran. Los presos se van yendo y voy quedando solo en los calabozos. Un paco se acerca a hacerme las típicas preguntas, le contesto con monosílabos y encogimiento de hombros; me informa que hay llamadas desde la Dirección Regional de Gendarmería lo que me confirma que algo esta pasando. Me llaman a Estadística, aquí el sistema funciona ordenándole a los presos una actitud sumisa y con las manos atrás, en la espalda. De hecho las manos atrás es una verdadera obsesión y pareciese casi el motivo existencial de los gendarmes. Entro a Estadística, párate ahí, pon las manos atrás. No cumplo, las manos al lado, tampoco miro hacia abajo, sino que los miro tranquilamente a todos. El paco me toma las huellas y las fotos respectivas, me dice que me va a hacer el ingreso, pero que es un tramite porque parece que voy al CAS. No me extraña, era esperable. Continúan las llamadas telefónicas, "si mi comandante, si, está frente a mi en este momento". Vuelvo a los calabozos y ahora sí que soy el único preso. Estoy a punto de pensar "estoy solo", cuando me acuerdo de mi hermano el ermitaño, mágicamente viaja hasta aquí, me acompaña, me mira y me sonríe, me vuelve a decir "hermano, recuerda, nunca estas solo". Una alegría me invade de prono, un orgullo renovado, me río. Aquí vamos.

Muy cansado, me tiendo en la banca metálica del calabozo, duermo a ratos. Ya es de noche cuando me trasladan hacia el interior de la cárcel, todo esto es nuevo para mi, me juntan con toros presos. ¡Las manos atrás! Me llaman a Guardia interna y hacen preguntas propias de pacos. Me doy cuenta que el nivel de los pacos es bastante más bajo que en la máxima y en la CAS. En algunos casos diría que francamente limítrofe, sin exagerar, además de ser "picao a choro", muy contaminados con el ambiente delictual. Ponte ahí, las manos atrás, sigo con las manos al lado. Me conversa un preso, me dice "usted viene por las bombas, salió en la tele", un "si" cortante y ya aburrido. Estoy castigado, me dice, me pillaron hablando por teléfono con mi polola. Típico preso joven, se sapea solo. Me sonrió y al mirar hacia el lado de un escritorio, botellas de chicha artesanal y unas cuchillas, no muy grandes. En Santiago 1 hay puras cuchillas cortas. Los presos miden las cuchillas en baldosas: dos baldosas y media, cuatro baldosas ¡Siete baldosas parece corazón valiente! Pero eso es en otras cárceles, yo nunca he visto algo así. Estas son como de dos baldosas...qué alivio.

El preso joven sigue hablando: "no le compris a ni un weon. Yo soy el que asaltó el Big John, yo le pegue al viejo con un fierro". Se achava solo (9). Está orgulloso. Pobre viejo, pienso. "Sí, lo vi en la tele", le digo. Me llevan afuera, una columna de presos, quedo al final. ¡Las manos atrás!

Avanzamos por el primer pasillo, que corre paralelo a la línea de fuego de la CAS, en dirección al Poniente. Somos un grupo de veinte presos que el paco va distribuyendo por los módulos. Llama a un grupo y nos encierra en una "pesca"; un espacio enrejado mientras sube por el modulo a dejar a los presos. Deja con nosotros a un preso que se va en libertad. Está feliz, como es lógico. Da su visión de la cana: "Andan unos pelo e choclo (10) terrible picao a choro, andan con las medias cuchillas y no respetan edad, no respetan ficha (11), no respetan ni una hueá". El paco vuelve y nos lleva al modulo siguiente en que nos ubicará: Modulo 4, Transito. Entramos, la visión es irreal, con las luces de los focos alumbrando desde atrás da una imagen fantasmal. El patio está lleno de basura. La arquitectura me hace recordar los departamentos de Paz Fraimovich. Apenas entramos los presos estallan en un grito desde sus celdas: "La lavadora, uh, uh, uh, uh...la lavadora uh, uh, uh uh" alcanzo a escuchar "bienvenidos al infierno", risas, alaridos, una escena surrealista, la verdadera horda de los bárbaros. Presos anti preso, ideal para el sistema. Distribuyen a los presos por celda, viven 2 o 3 en cada una. Llegamos a la que me toca, sale un preso que se va para la calle (en libertad) y entramos dos. Mi compañero de celda es un cabro de La Pintana, El Castillo, que trabaja de lanza en el centro y le robaron el celular a un weon que trabaja en el Ministerio de Justicia. Somos dos con mala suerte entonces. La celda es una mierda, un basural. Dos colchonetas de espuma llenas de chinches, da lo mismo cual elegir, las dos son nidos de ácaros. El piso está mojado, la frazada es un trozo inmundo de 30 x 50 centímetros y húmedo. La ventana no existe, entra todo el frío, seguramente la sacaron para fabricar cuchillas, no hay que ser genio para darse cuenta de ello. Leo unos trozos de diario La Cuarta y Las ultimas Noticias, el opio que distribuyen los grupos Edward y Saieh y que los pobres fuman con placer. Miro por la ventana y veo el Modulo J de la cárcel de Alta Seguridad donde estuve desde Agosto hasta Noviembre después de estar 8 meses en Máxima seguridad. Qué sera de mi hermano ermitaño. Recuerdo los mates que nos tomábamos en el patio pensando qué será de nuestras vidas, las conversaciones con Mario, de cuando hacíamos deporte, cómo nos reímos del asado que hacen los presos para el 18 de Septiembre...presos felices celebrando al país que los tiene encarcelados. No tenemos nada que ver con este país. Las rabias que hacíamos pasar a Timochenko cuando casualmente inutilizábamos sus lentes por jugarle una broma. ¿Te comiste un queque? Me los comí todos ¿Era sólo uno? Mar de risas. Las anécdotas de Krosty, las historias de almuerzo a lo vaquero...¡Deja de fumarte mi patio maldito Krosty! y ahora estoy acá, al otro lado de la línea de fuego y la marquesina, hasta podría llamarte, pero me cargan los presos que andan gritando.

Estoy exhausto. Me acuesto vestido sobre la colchoneta y me tapo como puedo con la frazada inmunda. Trato de dormir en posición fetal, aterido de frío y despertándome a cada rato por las picaduras de los chinches que me caminan por la cara. Las picaduras me acompañaran unas dos semanas. Sacudo la colchoneta para sacar a los chinches pero no tiene sentido, la colchoneta misma es un gran nido de ácaros. Duermo a ratos. Llega el gélido amanecer y para espantar el frío me doy una ducha helada (no pensaran que había agua caliente). Si piensan que estaba deprimido o que esto era terrible están equivocados; con el animo arriba y optimista siempre. Como dice Johnny Cash en "I Wont Back Down", "podrán ponerme a las puertas del infierno, pero no me rendiré". Me apresto a salir al patio y enfrentar esta nueva realidad, inclusive la de los presos que estúpidamente aceptan el papel de ejercer el domino sobre otros presos mas débiles. La noche ha sido rica en gritos, pelás (insultos), conversaciones caneras, "estoy certero pa los tajos", tratar a los demás de perkines, que los van a poner a lavar y todo el barretin carcelario. Cárcel, extrema pobreza y cuchillos, carne de presidio, la vida de los jóvenes pobres de este país se va por la alcantarilla. Ser lobo del hombre como decía Hobbes, aquí está el origen del Estado donde los seres humanos ejercen la dominación a punta de armas contra otros hombres, la guerra de todos contra todos y existe el temor a la muerte violenta. ¿Todos los presos son presos políticos? ¡Quien habrá inventado esa estupidez! ¡El 90% de los presos son el sostén del sistema.

Desencierro y bajar al patio, somos 100 presos o mas. Se ve a algunos muy jóvenes moverse con timidez y temor, tal vez sea primera ve que están presos, en este país la gente se va preso por cosas idiotas: una pelea de curao, una vieja que lo vio haciendo no se que, etc. Mi consigna para el periodo: "Manolo camina solo" ¡Permiso! y comienzo a caminar por el medio del patio, casi de extremo a extremo. Uno nuca está solo.

Algunos presos, todos muy jóvenes, saludan y se acercan a conversar, es el poder de la TV. Sonar en la tele es muy importante para el preso, es romper por un segundo el anonimato y la vida de encierro y miseria a la que han sido condenados desde que nacieron y que ellos consideran como natural, el irremediable destino.

De pronto un amigo, me cuenta su historia, la media volá, me presta un libro de Jodorowski, manual de piscomagia. Vaya libro para un lugar como este. Uno nunca está solo.

Pasan la cuenta en el patio ¡Las manso atrás! llaman a visita a todo el primer piso. Los pacos dicen el nombre y el primer apellido y tu dices tu segundo apellido. El paco es entero prepotente. A mi no me llaman porque me toca visita en la tarde lo que no llegó a ocurrir. Después mi familia me contó que la vista era en extremo indigna (ellos sí alcanzaron a entrar) la gente de pie con niños en los brazos, pésimo trato de gendarmería, increíbles faltas de respeto hacia los familiares, y al que no le gusta lo echan y no entra a visita.

Desayuno. No tengo taza pero rescato un pan. Hay alboroto para recibir el desayuno y ambiente de cárcel de menores. Uno está en calidad de taita. No es muy buena noticia que los presos sean muy jóvenes "tia regale una masa, oe bájate e la rama, hay que andar vio, sí ah qué wueá". Amagos de peleas en la fila. Vuelvo al patio, camino y doy algunas mascadas al pan solo. Siguen acercándose algunos presos a conversar, curiosos. Mis respuestas son respetuosas pero serias, cortantes. No es un lugar para hacer amigos, es una cana, todo es una relación de fuerza, tu lenguaje corporal, actitud, todo es observado. Sigo caminando solo por el medio del patio, se acerca mi compañero de celda, me trae una taza de café, esta con la carreta (12) de la Pintana. Trabajé en esa comuna, la conozco bien, trabaje con sus niños y adolescentes, conozco a sus padres y familias, conozco sus escuelas, sus profesores, nadie me cuenta cuentos sobre las "oportunidades" y las elecciones de la vida. Aquí nadie elige nada. Un madre sola al frente de su familia, trabaja para el señor Paulmann en Cencosud o el Señor Ibañez en el Lider, sale de su casa a las 6:30 AM y vuelve a las 23:30 de la noche, apenas ve a sus hijos; es la esclavitud moderna. Sus niños y niñas se van endureciendo, van creciendo mas rápido que el resto a golpes de balaceras, pasta base y pobreza extrema. Es el paraíso capitalista chileno. Lentamente la vida se les va cerrando: la construcción, un puesto en el retail por 350 lucas o la cárcel. Vivir para la prosperidad de otros, la vida por el sumidero. ¡Pero momento! Me dicen por interno que ya llegamos a los 15 mil dólares per cápita. Chile camino al desarrollo ¡Bien me parece!.

Entran dos gendarmes, uno es teniente. Me dice toma tus cosas, te vas de acá. No tengo nada, así que me voy del Módulo 4 de tránsito. El paco hace preguntas estúpidas que me revelan que no lee nada y pareciera que ni siquiera ve el noticiario de la TV. Me pregunta si estamos en contra los pacos de la calle y si tengo algo que ver con las manifestaciones y protestas. No le contesto. Luego se aleja y le comenta al otro paco, pero suficientemente fuerte para que y escuche que "Si alguno de estos weones le llega a tocar un pelo a mi señora" (Deduzco que su esposa es carabinero) "lo mando a matar con un perro". Un perro en jerga carcelaria es un preso de menor categoría al servicio de otro preso de mayor jerarquía o prestándose para la instrumentalización de los gendarmes, que pelea o hace antedatados a otros presos (ataques con cuchillas, lanzas , u otra arma). Sin mirar, el paco se va y habla con los gendarmes a cargo de los módulos 1 y 2.

Otro paréntesis. Yo ya había escuchado que en Santiago 1 había un paco que golpeaba y amenazaba a los jóvenes que caían presos por protestas callejeras. Creo altamente probable que se trate de este miserable. Hay un Teniente de Gendarmería que amenaza con mandar a matar a quien el considere ha afectado a su esposa carabinero. Es tan cobarde que ni siquiera le pega él, sino que lo manda a matar con un perro. Esto no es novedad, toda la gente con experiencia carcelaria sabe de estas tramas orquestadas por Gendarmería donde incluso disfrutan y hacen apuestas en peleas con armas hechizas, cual circo romano. En Santiago 1 hay cuchillas esperando por los jóvenes que caigan presos en protestas callejeras y las maneja un teniente de Gendarmería.

Me destinan al modulo 1 de Alta seguridad. El paco dice: aquí hay puros famosos y gente que ha salido en la tele, delitos connotados. No le digo nada y entro. De inmediato se ven la mitad de presos que en el modulo 4 y se notan presos mas adultos, eso es mejor, pero igual me voy con pie de plomo, yo ya he tenido problemas con presos por tener un acercamiento ingenuo o porque pensé que los presos son buena onda (tipo todos los presos son presos políticos). Inmediato se me acerca un preso que me da el siguiente discurso: "Hans, te estábamos esperando. Mira, ahí está el mundo, ahí están todos adentro del barretín (13),aquí está Dios, aquí está el señor diciendo que te des una oportunidad". Era un preso evangélico invitándome a caminar con el señor. Respetuosamente le digo que gracias pero prefiero que no. Me pongo a caminar en el patio, se me acerca un preso y me invita a su carreta a tomar mate. Me saludan y entro a la rueda de mate, hay puros ladrones y asaltantes. Almorzamos y la tarde transcurre conversando con varios presos, caminando por el patio, ver un partido de fútbol y otra rueda de mate. Un breve amago de pelea. Buen recibimiento y además me entero que las visitas son en un locutorio, pero que son cuerpo a cuerpo y sale poca gente a la visita. Del modulo de máxima seguridad (Modulo 2) me llaman unos presos, me saludan y me ofrecen una radio, mañana se las devuelvo, bacán. Ya encerrado en la celda, pasan 40 minutos y la puerta se abre, son dos pacos, "Niemeyer, toma tus cosas, vas saliendo". No tengo nada, sólo me acompaña Jodorowsky, dudosa compañía pero al menos es lectura. ¿Y adonde voy?, "Lo desconozco", dicen. Salimos del modulo y caminamos por el primer pasillo casi hasta el final. Me meten a unos calabozos y me ofrecen dos jugos Kapo. Los acepto porque es glucosa y no se sabe lo que pueda venir.

Paseo por el calabozo, leo los rayados: "aquí estuvo un cordobés", una A en un circulo, símbolo anarquista, "el fernet con cola porque pega más", "el chiqui es choro. ¿queeeeee?", "La victoria", "Santa Olga", "Jose Maria Caro".

Pasan los minutos, comienza a oscurecer. Recuerdo la primera vez que estuve preso, Septiembre del 92, brutalmente golpeado por Carabineros, la cabeza rota, el sufrimiento de mi madre Seguí yendo hacia atrás como retrocediendo en una película.... ¿Donde comenzó todo? ¿Hay un punto o solo es una combinación de situaciones azarosas? No me gusta ser auto referente, pero hablo conmigo de mi vida, es una introspección, recuerdo tantas cosas, tantas situaciones. Año 1988, enfrentábamos la dictadura en la calle y no con un lápiz como dice Ricardo Lagos Escobar. Marcha en el centro, el "Huascar" dispara su chorro de agua, todos nos agachamos tras los muros de la salida del Metro Universidad de Chile, en la cara un pañuelo artesanal, contraatacamos con piedras. En la pared amarilla de la Universidad de Chile un joven raya con Spray rojo: SUBLEVACION NACIONAL. Una barricada en Dieciocho con Alameda, revientan molotov en el pavimento, el transito detenido, panfletos del No hasta vencer. Lienzos en Irarrázaval con Vicuña Mackenna de saludo al frente. Reuniones en el CEI de Ingeniería, en Arquitectura, conseguir el Centro Paulo Lavrí para una reunión en Santa Rosa, hacer letras gigantes de madera envueltas en papel de diario con cera y bolsas de basura para encenderlas en Carmen con Alameda. Una tristeza, una amargura me gana el animo.

¿Hablemos de historias viejas? Noviembre de 1988. Tengo 15 años. Después del plebiscito, en vez de la alegría, se ha vertido un río de sangre rebelde. Conversamos en Lord Cochrane con Alameda con dos compañeros de colegio. Uno, dos cursos más arriba que yo, que me recluto para la Jota y otro compañero que ubico solo de vista. Ha muerto Pablo Vergara y Aracely Romo en Temuco. Un compañero cuenta que en su población había barricadas hoy en la mañana. Los funerales son al día siguiente....¿Vamos? ¡Vamos, claro que sí!. Al otro día hacemos la cimarra y nos juntamos en el mismo lugar de la conversación del día anterior. ¿En micro o caminando? Caminando y conversando el viaje se hace corto hasta la plazoleta frente al cementerio general, donde termina Avenida La Paz. Todo se ve tan prístino, éramos tan puros, hasta los colores se ven más vivos. Soy muy flaco, tengo pelo, de hecho levemente largo. Visto una camisa escolar, bluyin y zapatillas. Pucha que se demoran, dice el gitano. El otro flaco interviene, "Lo único que me preocupa es si van a entrar por aquí o por Recoleta". El ambiente es tenso, pasan patrullas de pacos y autos civiles con tenebrosos personajes. De pronto: Ahí vienen. Miramos hacia Avenida La Paz y a lo lejos se ve el cortejo fúnebre y más atrás unas micros llenas, con gente hasta en el techo y banderas rojinegras del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR).

Saliendo por las ventanas. Giran por la rotonda y siguen rumbo a Recoleta. Rápidamente nos paramos, ¡Vamos por dentro! Entramos por la puerta principal, caminamos rápido por dentro del cementerio y alcanzamos a interceptar la gruesa columna de gente que ya ha comenzado su marcha a enterrar a Pablo. Las voces se hacen una sola y suenan estremecedoras, se me pone la carne de gallina: Pueeeblo, concieeeencia, fusil , MIR, MIR....Pueeeeeblo, concieeeencia, Fusil, MIR, MIR. Rostros con pañoletas, puños en alto. Una estruendosa explosión se escucha en el cementerio, una bomba de ruido. La multitud prorrumpe en aplausos y gritos: ¡Maroto cardenal, iglesia popular. Maroto cardenal, iglesia popular!. Agitando rítmicamente los puños, hay pacos armados con fusiles y cascos de guerra en actitud nerviosa, apuntan a la gente. La señora Luisa y Don Manuel piden silencio, hablan, están destrozados, entierran a su tercer hijo muerto después de perder a Rafael y Eduardo en 1985. Piden respeto por sus creencias, piden arrodillarse, tomarnos de las manos y rezar un padre nuestro. La multitud respetuosa se arrodilla y reza, sean creyentes o no. Yo por lo menos lo era. En los cuatro o cinco años siguientes centenas de jóvenes pagarán con sangre y cárcel su intento de torcer la nariz a la historia, evitar la salida institucional de la dictadura e insistir con la lejana posibilidad de una ruptura subversiva. Le llamaron a su batalla Guerra Insurreccional de Masas. ¿Te acuerdas de esos tiempos Ermitaño, cuando te conté que recogía los panfletos desperdiciados en el Gimnasio Manuel Plaza y los lanzaba en el centro de esta ciudad? ¿Te acuerdas de esos tiempos tu que estás en tu casa, ahora que la vida se la robó la normalidad? La noche cae en un calabozo de Santiago 1.

III. De vuelta a la máxima.

El grupo TAR de Gendarmería se presenta, son tres gendarmes, a varios ya los conozco. Revisión exhaustiva de toda la ropa, genitales arriba, plantas de los pies, calcetines, zapatillas, piernas, torso, abre la boca, las palmas de las manos, detrás de las orejas. Grilletes de pies y manos, "Medidas largas" en lenguaje policial. Pasas la cadena por dentro del pantalón y cierran el grillete en el tobillo. "Te voy a poner en una sola pierna para que puedas caminar ¿De acuerdo?" De acuerdo. Chaleco amarillo y esposas en las manos. Recorremos de vuelta el primer pasillo. Una paramédico lleva un documento reglamentario. Nos vamos. Hablan por la radio "en camino con el dos seis Niemeyer, dirección Beta, máximas medidas de seguridad". Larga caminata por los pasillos subterráneos hasta la Zona de Transito. Breve estadía en un calabozo, se arman con una subametralladora Famae y una escopeta, y nos pasa a recoger el furgón. Salimos a Pedro Montt, es Sábado 27 de Abril alrededor de las 21:00 horas, miro por la estrecha ventanilla enrejada y en la calle no hay casi nadie. Se baja un funcionario armado y detiene el transito, el vehículo entra en marcha atrás y me sorprende ver a los funcionarios grabar el procedimiento. Estamos de vuelta en la unidad especial de alta seguridad, sección de máxima seguridad, nuestra pequeña Guantánamo.

Entrada laberíntica a "la máxima", los funcionarios hablan por citófono: "un ingreso" y la puerta electrónica se abre. Me recibe un sargento, revisa los papeles, de nuevo desnudarse, revisión de toda la ropa, de nuevo paramédico, ¿Tiene alguna enfermedad crónica? Si, meter la cabeza al water ¿Fuma, consume alcohol, drogas, toma algún medicamento?¿Cuanto mide, cuanto pesa? De vuelta al sargento: "Bueno usted ya estuvo aquí, ya sabe como es el sistema, respetar para ser respetado".

Me destinan al primer piso, pasillo de especial vigilancia. Este lugar ya lo conozco, es un experimento humano. Abren la celda, entro, la cierran. Por lo menos al celda es limpia, hay tres frazadas (no moriré de frío) y la colchoneta es decente, así que no moriré devorado por los ácaros. Apenas los pacos se van, los presos comienzan a llamar "oe, el loquito que llegó", "qué pasa", "porque venís", "de dónde, qué paso, ah la media volá, mañana sale al patio". "Hermano, tenís hambre", me preguntan conocidos ladrones de bancos. "La verdad que sí", "calmao te voy a mandar un correo" (14). Esto sí que es un clásico, la solidaridad de los presos. Me tiran el correo y me llegan 2 sándwiches de tomate palta y media botella de jugo. Doy las gracias, mañana nos vemos. Estoy hambriento y cansadísimo, prácticamente 48 horas que no duermo. Me siento en la colchoneta sobre la superficie de hormigón y me como los panes. Hago un salud con jugo de durazno y se lo dedico a los fascistas de internet...."que se pudran en la cárcel" digo y no puedo evitar reírme.

Me tiendo en la cama, veo la reja que cubre toda la cárcel, la torreta con sus troneras y sus potentes focos. Recuerdo cuando te decía "pase lo que pase, vamos a mirar el cielo, la constelación de Orión y la luna, y vamos a recordar este momento". Creo que te mentí, desde aquí el foco impide ver la luna y las estrellas. Se me cierran los ojos de cansancio, el sueño entra tibio, agradable, envolvente. Hasta que de nuevo estoy en los bosques y las montañas, ustedes me miran y se ríen, pequeño colibrí me apunta con su dedito "ile nuna" (mire luna) y le digo "si hijo, la luna", y de nuevo nos fugamos, ya no pertenezco a la prisión.

Hans Felipe Niemeyer Salinas

Finales de Mayo del 2013.

Cárcel de Máxima Seguridad.

Santiago, Chile.
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Notas:

(1) En Chile hay dos policías de carácter nacional, La policía de investigaciones (PDI) y la policía militarizada de carabineros de chile. Ambas tienen organismos especiales dedicados a la inteligencia política.

(2) “Pana”: Valor, Coraje

(3) EMOL: Portal de internet de “noticias” perteneciente al grupo Edwards dueño de la mitad de los periódicos en Chile.

(4) “Pau de Arara”: Tortura implementada sistemáticamente por las distintas policías y militares en dictadura y la continuidad del régimen. Consiste en colgar al detenido con sus pies y manos a un palo en altura durante largas horas, siendo golpeado.

(5) Parrilla: Tortura policial que consiste en amarrar al detenido a una catre de metal mientras se le pone corriente.

(6) Chacarillas: Cerro de Santiago, contiguo al cerro San Cristóbal hacia el oriente. Este lugar fue escenario al final de la década de los 70 de una ceremonia de la dictadura cívico militar en que participaron "representantes" de la juventud chilena entre los que estaba Chadwick. El acto, con una clara estética nazi, acompañado de antorchas tuvo un carácter fundacional del proyecto histórico y el modelo económico social que rige hasta el día de hoy.

(7) Marcos Vásquez Meza. Director general de la Policía de Investigaciones

(8) El 4 de Enero del 2013 mueren la pareja de ancianos latifundista y terratenientes Luchsinguer-Mackay producto de un atentado incendiario contra su fundo. Tras el desarrollo de estos acontecimientos, el Estado y sus ministros realizan campañas comunicacionales, congresos policiales, cumbres de inteligencia creando unidades especiales para militarizar el territorio mapuche, construyendo un verdadero frenesí antiterrorista.

(9) Achaba, achabarse: Asumir responsabilidad, reconocer un hecho.

(10) Pelo e’ choclo: Pendejos, cabros chicos.

(11) Ficha: Especie de curriculum de un delincuente o preso. un preso ficha es un preso de jerarquía y respeto.

(12) Carreta: Grupo de presos donde se comparte alimentos, conversación, se toma mate. Los presos se juntan en carreta por comuna, interés, lazos de amistad o familiares.

(13) Barretin: El barretin, ser embarretinado. Ser parte de la cultura carcelaria

(14) Correo: paquete enviado por los presos de celda a celda o a otro piso, amarrado por un cordel

Tomado de Hommodolars.